Jue. Mar 28th, 2024

El sábado, día once, nos levantamos temprano para visitar la ciudad romana IMG-20150412-WA0026de Acinipo y el pintoresco pueblo de Setenil.
Desayunamos en ruta y, sobre las once, estábamos en Acinipo donde nos esperaba Mari Carmen, la guía de Setenil, que sería nuestra anfitriona durante el resto del día.
IMG-20150412-WA0004Mientras lloviznaba, Mari Carmen nos explicó que Acinipo había sido una ciudad romana importante y que, durante mucho tiempo estuvo abandonada, pero que  ahora el yacimiento había sido cercado para evitar el expolio a que había sido sometido. Vimos y paseamos el teatro, las termas y algunos restos dispersos y nos comentó que esperaba que, en el futuro, hicieran una excavación más completa.
Más tarde la guía nos habló de los orígenes de la villa que fue conquistada por los Reyes Católicos el año 1484, un año antes que Ronda, cuando ya habían tomado toda la vega antequerana. Fue un largo sitio y prueba de ello es que hay una escena sobre ese asedio en la catedral de Toledo y para tenerlo todo, figura en el romancero, ya que , según cuenta el romance, los moros de Setenil mataron al alcaide cristiano de Cañete ( romance de Fernandarías). Posteriormente visitamos los restos de la fortaleza árabe y la iglesia parroquial del siglo XVI.IMG-20150412-WA0020
IMG-20150412-WA0024Almorzamos pronto, bien y con una buena panorámica. Mari Carmen se presentó en seguida para pasear con nosotros su preciosa villa. Es uno de esos pueblos que se sale de la normalidad, sobre todo por su entramado urbano, que baja desde la fortaleza adaptándose al río Guadalporcun, por lo que tiene diferentes alturas . En la parte baja, los vecinos aprovecharon el tajo creado por la roca para edificar sus casas. Se trata, según nos explicó la guía, de un tipo de vivienda llamado “abrigo bajo rocas”, en  que no se excava la roca sino que se limita a cerrar la pared rocosa y se construye de forma longitudinal.
IMG-20150412-WA0021Mari Carmen nos enseñó y explicó algunas de sus calles más típicas y emblemáticas y, aunque acabamos un poco cansados, le agradecimos el paseo y la explicación.
Después hicimos algunas compras y nos volvimos a Málaga satisfechos y agradecidos, a la guía, al chofer y al tiempo ya que nos hizo un claro mientras paseábamos ese pueblo tan original.

                                                                                                Edición: Berlanga

                                                                                                Publica: A.Aroca

Por Casyufera

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